Especialmente indicada en pieles sensibles, irritadas o con rosácea. Las propiedades de la avena hace de este producto un auténtico alimento para la piel, brindándole la hidratación necesaria, dejando una sensación de frescura y confort. Si la piel sufre agresiones externas, cambios bruscos de temperatura, o la exposición a los rayos solares, devuelve en forma inmediata la calma y los nutrientes perdidos. Producto altamente recomendable en ezcemas, y/o dermatitis. Brumizar la piel cada vez que se considere necesario.